Los cuadros de mando pueden ser el secreto mejor guardado para gestionar eficazmente los siniestros.
Un cuadro de mandos bien ejecutado te muestra de un vistazo todo lo que necesitas para evaluar la salud de tu operación de reclamaciones. Puedes encontrar respuestas y visualizar los KPI en tiempo real. Y los gráficos hacen que la información compleja sea comprensible al instante.
Construir un cuadro de mando eficaz empieza por decidir qué métricas mostrar. ¿Qué información necesitas para asegurarte de que las reclamaciones se tramitan con eficacia? Mantén tu cuadro de mandos centrado en las seis u ocho métricas que necesitas para hacer tu trabajo con eficacia. Más que eso hará que tu tablero de mandos esté desordenado y sea difícil de leer, lo que anula todo el propósito.
Entre los KPI de seguimiento habitual (diario, semanal o mensual) se incluyen:
- Nuevas pérdidas (que pueden subdividirse por incidentes, reclamaciones, demandas y líneas de cobertura)
- Gravedad (media incurrida por siniestro, los 10 mayores siniestros por ubicación o causa)
- Siniestros cerrados (porcentaje de cierre)
- Duración media de los siniestros
- Coste medio por siniestro
Una vez que te hayas centrado en las métricas adecuadas, presta atención a cómo está organizada la información.
Un buen salpicadero:
- Actúa como centro neurálgico de tu operación de siniestros. La información crítica está en un solo lugar y bien organizada para obtener respuestas rápidas.
- Cuenta una historia clara. Los gráficos son algo más que un caramelo para la vista. Contextualizan los datos y transmiten hechos concretos de forma más eficaz que los números de una tabla.
- Sigue la regla de los 5 segundos. Deberías poder encontrar lo que buscas en 5 segundos o menos.
Coloca las métricas más significativas en la parte superior de la pantalla y la información más detallada en la parte inferior, para una disposición más intuitiva. - Reduce el desorden. Incluye todo lo que necesites, y nada que no necesites.
Utiliza tu espacio sabiamente, y agrupa los datos de forma lógica.
Sigue estas reglas y acelerarás tu panel de reclamaciones hasta niveles de alto rendimiento. Combínalo con un análisis concienzudo y un seguimiento atento, y te dirigirás directamente hacia el éxito.