Los datos pueden ser desalentadores, especialmente para los gestores de riesgos y los profesionales de la seguridad del paciente, que tratan con grandes cantidades de datos procedentes de muchos sistemas diferentes. Si a eso le añadimos la complejidad de consolidar los datos y luego transformarlos en información significativa para tu organización, puedes sentir la tentación de ignorarlos por completo. Pero en el mundo actual eso no es realmente una opción. Es fundamental que tus datos sobre riesgos y seguridad del paciente se gestionen, analicen y transformen fácilmente en información procesable para tomar decisiones mejores y más informadas. De lo contrario, pueden producirse costes financieros, operativos y estratégicos muy reales, así como problemas de seguridad de pacientes y empleados. La mayoría de los gestores de riesgos no son expertos en datos ni científicos. En consecuencia, es imprescindible que identifiquen y seleccionen socios (tanto internos como externos) que les ayuden a comprender mejor sus datos, cómo aplicar las mejores prácticas de gestión de datos y cómo aprovechar los análisis para obtener perspectivas más profundas y significativas. Como colaborador de muchas organizaciones sanitarias en esto, aquí tienes mis consejos sobre cómo establecer un programa eficaz de análisis de riesgos sanitarios en tu organización.
1. Define y prioriza los objetivos. La mayoría de los departamentos de riesgos sanitarios se centran en reducir el coste total del riesgo, prevenir los acontecimientos adversos y mejorar la seguridad de pacientes y empleados. Pero, ¿qué otros objetivos quieres alcanzar? ¿Tienes escenarios o tendencias específicos que deban identificarse mejor? ¿Hay iniciativas estratégicas que debas apoyar? Lo mejor es definir tus objetivos de antemano para saber exactamente lo que intentas conseguir con tu programa de análisis de riesgos sanitarios.
2. Determina cómo medirás el éxito. Una vez que hayas definido y priorizado tus objetivos, es fundamental que definas qué aspecto tiene el éxito y obtengas la aprobación de la alta dirección y otras partes interesadas clave de la organización. Según mi experiencia, muchas personas pasan por alto este paso y al final del año no cumplieron las expectativas de sus partes interesadas porque no se definieron por adelantado los criterios de éxito. Hecho al principio, esto te permitirá articular la eficacia del gran trabajo de tu equipo y el impacto que habéis tenido en la organización. Además, al definir tus objetivos y determinar cómo se medirán, podrás identificar los recursos y el presupuesto necesarios para alcanzarlos con éxito.
3. Identifica e involucra al equipo de socios y partes interesadas que te ayudarán. El equipo debe incluir partes interesadas internas, como miembros de tus equipos de seguridad del paciente, equipos de calidad, gestión de riesgos, recursos humanos, departamentos financieros y (por supuesto) tu departamento informático. Externamente, debes considerar las aportaciones de tu proveedor del Sistema de Información de Gestión de Riesgos (RMIS), las Organizaciones de Seguridad del Paciente, el corredor de seguros, los actuarios y los consultores externos. Juntos, puedes trabajar con tu equipo para empezar a recopilar, organizar, acceder, agregar y, por último, analizar tus datos. 4. Pon en marcha tu programa mejorado de análisis de riesgos sanitarios. Esto podría requerir modificaciones de un proceso existente, o quizá incluso empezar de cero. En cualquier caso, aquí tienes algunas cosas que tu equipo debe tener en cuenta antes de ponerlo en marcha.
- ¿Cómo compartirás (o vincularás) tus datos de seguridad del paciente con tus datos de riesgos y/o reclamaciones? A menudo se pasa por alto o se ignora. Si no eres capaz de vincular los datos de seguridad con los de siniestros y riesgos, tu capacidad para tomar decisiones empresariales eficaces puede verse comprometida.
- Utiliza taxonomías comunes, o estándar. Ya se trate de jerarquías de ubicación o de terminología para campos comunes (como datos sobre incidentes, datos sobre pérdidas o fecha de notificación, por ejemplo), disponer de una taxonomía común con definiciones de datos establecidas y documentadas hará que el proceso de agregación de datos sea más fácil, rápido y eficaz. Utilizar taxonomías comunes o estándar del sector es especialmente útil cuando se trabaja con organizaciones externas. Los formatos comunes de la Agency For Healthcare Research and Quality son un ejemplo de taxonomía estándar que se utiliza y permite compartir datos externamente con más facilidad y precisión.
- ¿Con qué fluidez puedes transferir datos entre sistemas? ADT, EMR, sistemas de laboratorio, sistemas de farmacia, facturación, programación, RRHH, sistemas de seguridad… todos estos sistemas pueden ser fuentes de datos que las organizaciones sanitarias necesiten agregar para un análisis eficaz. Esto puede resultar difícil y caro. Sin embargo, si se hace correctamente, la inversión merecerá la pena. Trabaja en estrecha colaboración con tu departamento informático y tu proveedor de RMIS para ser lo más eficaz posible.
- ¿Cómo de seguros están tus datos? Todos hemos oído hablar de las recientes filtraciones de datos sanitarios en las noticias. Una de las consideraciones más importantes a la hora de establecer tu programa de datos y análisis es la seguridad de los datos. La seguridad de los datos no sólo tiene que ver con las aplicaciones de Internet, los servidores y los navegadores. También tiene que ver con el control de tus datos… a través de informes, acceso de usuarios e interfaces hacia y desde otros sistemas. La seguridad de los datos debe ser un componente fundamental de tu proceso de análisis de riesgos sanitarios.
5. Medir y mejorar. ¿Es eficaz tu nuevo proceso de datos y análisis? ¿Qué mejoras puedes hacer para que los datos se compartan con más facilidad y precisión? ¿Hay otros sistemas con los que te gustaría compartir datos o un nuevo informe que crees que sería beneficioso para tu organización? Puede ser útil utilizar el mismo enfoque que se emplea en los planes de acción correctiva para los programas de seguridad del paciente. Asignar una parte responsable, métricas de éxito y plazos definidos para medir el éxito puede ayudar a descubrir el impacto de tu programa de análisis de riesgos sanitarios. La inversión en análisis de riesgos sanitarios es importante y los beneficios son claros. Tendrás unos criterios de éxito acordados en los que trabajar, podrás ver los efectos directos del trabajo de tu equipo, tendrás una mejor perspectiva de las tendencias y pautas que causan tus riesgos y exposiciones, comprenderás la probabilidad y el impacto que tienen en tu organización, y determinarás qué hacer para prevenirlos, reducirlos o eliminarlos. Toda la información y los conocimientos que recibas te permitirán alcanzar los objetivos que definiste al inicio del proceso. Y, el impacto que habrás conseguido reduciendo el coste total del riesgo de tu organización y mejorando la seguridad de pacientes y empleados compensará con creces la inversión necesaria para ponerlo en marcha.
¡Feliz análisis!