El éxito de un proyecto se ve constantemente amenazado por un aluvión de riesgos procedentes de todas direcciones.
Mantener esos riesgos a raya requiere previsión y planificación anticipada.
¿Qué es la gestión de riesgos de un proyecto y puede ayudar realmente a mantener tus proyectos en el buen camino?
La gestión de riesgos del proyecto es el proceso de identificar, analizar y responder a los riesgos que puedan surgir a lo largo del ciclo de vida de un proyecto.
El propósito es limitar al máximo el impacto y las consecuencias de los riesgos negativos, para que puedan alcanzarse los objetivos del proyecto.
La gestión de riesgos del proyecto también permite a los profesionales del riesgo y del proyecto identificar los riesgos que merece la pena asumir y maximizar la oportunidad que se presenta.
Imagina que pudieras encontrar la forma de entregar tu proyecto antes de lo previsto, o de marcar una diferencia significativa en la rentabilidad final del proyecto tomando decisiones más inteligentes.

¿Para qué sirve la Gestión de Riesgos del Proyecto?

Los riesgos con los que es más probable que te encuentres en cualquier proyecto son la ampliación del alcance o del presupuesto, la programación, la cadena de suministro y los problemas de recursos.
Adoptar un enfoque proactivo de la gestión de riesgos de los proyectos puede ayudarte a identificar, sortear o rectificar los problemas para evitar que los proyectos críticos incumplan los plazos, superen los presupuestos o no consigan lo que se proponen.
Considera estos cinco pasos para influir en unos resultados más positivos:

  1. Identificar los riesgos del proyecto

Tu capacidad para identificar los riesgos potenciales de tus proyectos puede significar la diferencia entre el éxito y el fracaso.
Para ello, los gestores de proyectos o de riesgos deben:

  • Comprende los riesgos potenciales y calcula su probabilidad de ocurrencia y su impacto probable.
  • Recopila metódicamente los datos sobre riesgos y pon las conclusiones a disposición de todas las partes implicadas.
  • Considera diferentes escenarios y aplica las lecciones de proyectos similares.
  • Comparte experiencias e ideas tanto con el equipo como con las partes interesadas del proyecto.
  1. Analizar y priorizar los riesgos

Una evaluación eficaz de los riesgos puede ayudar a reducir la probabilidad de que tu proyecto sufra un impacto negativo.
Técnicas populares como el análisis de riesgos cualitativo y cuantitativo pueden ayudar a tus equipos a comprender los factores determinantes y la gravedad potencial de cada amenaza desde una perspectiva global del proyecto.
Si puedes determinar con precisión qué riesgos podrían suponer la mayor amenaza -o la mayor oportunidad-, tendrás una idea más clara de dónde es mejor centrar los esfuerzos y los recursos.

  1. Supervisar los riesgos y los planes de respuesta

Las amenazas y oportunidades pueden evolucionar y surgir a lo largo de todo el ciclo de vida del proyecto, por lo que vigilar de cerca los riesgos es una parte importante de la gestión de riesgos del proyecto.
Para lograr los resultados que te propones, las mejores prácticas incluyen:

  • Seguimiento de los riesgos identificados
  • Control de los riesgos residuales
  • Acordar respuestas al riesgo
  • Evaluar la eficacia de los procesos de riesgo

La flexibilidad también es importante.
Los riesgos son imprevisibles.
Los riesgos existentes pueden cambiar con el tiempo, y de repente pueden aparecer nuevos riesgos.

  1. Realizar auditorías de riesgos

Las auditorías de riesgos pueden ayudar a los gestores de proyectos a minimizar los riesgos potenciales y aplicar estrategias eficaces para mitigarlos, como medio de mantener los proyectos en la senda del calendario y los presupuestos.
Puede realizarse un análisis de reservas junto con la auditoría de riesgos para ayudar a arrojar luz sobre cualquier amenaza para los fondos del proyecto.

  1. Gestiona el riesgo

Una vez que hayas identificado los riesgos potenciales, querrás formular tu respuesta.
Aquí tienes cuatro técnicas probadas de gestión de riesgos:

  • Evita el riesgo. Algunos riesgos simplemente no merece la pena correrlos.
  • Mitigar el riesgo.
    Esta opción te permite es continuar con las actividades esenciales para la progresión del proyecto, al tiempo que pones en marcha medidas para protegerlo.
  • Transfiere el riesgo. Transfiere el riesgo a un tercero, normalmente contratando un seguro.
  • Acepta el riesgo. A veces es mejor aceptar pequeñas amenazas en determinadas situaciones.

Recuerda que aceptar los riesgos después de considerarlos detenidamente puede crear oportunidades.
Cuando la recompensa compensa la amenaza, los riesgos están maduros para ser explotados.
¿Hay medidas que puedas tomar para aumentar la probabilidad de que se produzca un riesgo positivo?
¿O podría surgir la oportunidad compartiendo la respuesta al riesgo con un equipo más amplio u otras partes interesadas del proyecto?

¿Qué es el software de gestión de riesgos de proyectos?
¿Y puede ayudar?

Una tecnología de gestión de riesgos centralizada y totalmente integrada es esencial para una gestión eficaz de los riesgos del proyecto.
El software actual de gestión de riesgos de proyectos puede darte una visión en tiempo real de todos los riesgos de todo el proyecto, y de cómo cada riesgo puede interactuar e influir en los demás.
Los equipos pueden trabajar de forma proactiva, detectar señales de alarma y colaborar en las acciones adecuadas para prevenir o mitigar los daños.
Armados con datos coherentes, fiables y significativos -que abarcan desde el riesgo de terceros hasta el de la cadena de suministro-, los profesionales del riesgo pueden tomar decisiones informadas a lo largo del ciclo de vida del proyecto.
¿Qué es la gestión de riesgos de un proyecto?
Básicamente, es el proceso de identificar y gestionar el riesgo antes de que las cosas se descontrolen.
Y en el actual clima empresarial hipercompetitivo, merece la pena explorar cualquier práctica que pueda ayudar a reducir la incertidumbre, proporcionar los datos que necesitas para tomar decisiones de inversión acertadas y, en última instancia, aumentar tus posibilidades de éxito del proyecto.

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