por Jim Wetekamp
Como se publicó en Supply & Demand Chain Executive
El riesgo económico es difícil de predecir y anticipar, pero hay medidas que las empresas pueden tomar para ayudar a proteger su cadena de suministro y su negocio.
El impacto económico a corto plazo de la pandemia de la enfermedad por coronavirus (COVID-19) está resultando mucho peor que la crisis financiera de 2008. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) estima recortes mundiales equivalentes a casi 200 millones de trabajadores a tiempo completo en los próximos tres meses. El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé una renta per cápita negativa para más de 170 países. Los pedidos de refugio, los cambios masivos en el comportamiento de los consumidores y la ralentización sin precedentes de la fabricación están causando dificultades financieras generalizadas a los proveedores. Y el aumento de lasdeclaraciones de«fuerza mayor», en las que circunstancias imprevisibles impiden el cumplimiento de los contratos, tiene a las empresas en apuros. La pregunta es: ¿Cuánto empeorará esto? ¿Y cuánto durará?
