¿Estás preparado para integrar el riesgo, la calidad y la seguridad a través de la tecnología? Aquí tienes una lista de cosas a tener en cuenta cuando vayas a comprar un RMIS sanitario.
Un sistema. Disponer de un sistema para la información sobre seguridad, calidad y riesgos, como un Sistema de Información de Gestión de Riesgos (SIGR), diseñado específicamente pensando en la asistencia sanitaria. El software debe incorporar eficazmente los requisitos únicos -y posiblemente las prioridades contrapuestas- de cada función, aumentar la automatización y apoyar tus flujos de trabajo. Y asegúrate de que capta toda la información que todos necesitan para los informes.
Formación. Incluso el mejor software es prácticamente inútil si nadie se siente cómodo utilizándolo. Busca un programa que sea fácil e intuitivo de usar desde el principio. Incluso entonces, será necesaria cierta formación para sacar el máximo partido a tu software, pero la mayor funcionalidad merecerá la inversión de tiempo y esfuerzo.
Informe anónimo. Proporcionar un entorno seguro para el debate abierto y honesto es esencial para descubrir verdades. Abre la notificación de incidentes a cualquier persona de la organización, y permite que las denuncias se hagan de forma anónima.
Fácil notificación de incidentes. No puedes investigar algo de lo que nunca se ha informado. Asegúrate de que el software facilita y hace accesible la notificación de todo tipo de incidentes o cuasi incidentes. Sólo puedes tomar medidas para mejorar la situación si la conoces desde el principio.
Revisa el análisis de causas raíz y las investigaciones de auditoría de sucesos. Llegar a la raíz de un problema puede en realidad resolver varios otros por el camino. Toma lo que aprendas y aplícalo a otras áreas para amplificar tus resultados.
Esfuérzate por conseguir las mejores prácticas. Establece un sistema de revisión, actualización y difusión de las políticas y procedimientos clínicos con la vista puesta en la mejora constante. Reducir las ineficiencias es un proceso continuo que puede generar grandes mejoras en la productividad y la seguridad.
Aprovecha una estructura común. Utiliza una configuración que siga las normas del sector, teniendo en cuenta al mismo tiempo la singularidad de tu organización. Y asegúrate de que será aceptada y comprendida por todos los usuarios.
Muéstrate abierto al cambio. Cualquier sistema nuevo implica algún cambio. Sé flexible con tus procesos y flujos de trabajo para aprovechar las herramientas disponibles a través del software. Una vez en marcha, un RMIS sanitario puede ayudarte a crear mejores alianzas entre riesgo, calidad y seguridad, y a lograr sinergias que reduzcan el riesgo, disminuyan los costes y mejoren la seguridad del paciente. Todo lo que hace falta es un poco de planificación.