Impulsar los objetivos de Gestión de Riesgos requiere una línea de visión clara en todo tu ecosistema de riesgos. Y cuanto más riesgo tengas, más importante es obtener la información que necesitas cuando la necesitas. PERO… Con varias partes interesadas en cualquier ecosistema de riesgos, incluidos proveedores, transportistas, TPA, corredores y partes interesadas internas como RRHH, finanzas y jurídico, cada vez es más difícil recopilar y gestionar los datos de seguros de forma eficaz y rentable. ¿A qué se debe todo este retraso en la consolidación y gestión de los datos de gestión de riesgos? La fricción de datos -todo lo que obstruye el flujo de información- es lo que convierte un proceso aparentemente sencillo en una costosa carga. Entonces, ¿qué causa la fricción de datos en la Gestión de Riesgos? He aquí las 3 cosas que frenan tus datos: Tecnologías dispares. Extraer manualmente información de numerosas fuentes y convertirla en informes significativos que muestren la imagen real de los riesgos y las exposiciones no es tarea fácil. Consolidar y reformatear hojas de cálculo puede añadir semanas a tus procesos y dejarte expuesto a errores. Y agregar datos de varias unidades de negocio que utilizan sistemas diferentes requiere mucho tiempo y trabajo, y te aleja del análisis de mayor valor de esa información. Tu sistema de RRHH formatea los datos de forma diferente a tu sistema financiero. Tu aseguradora de responsabilidad civil general formatea de forma diferente a tu aseguradora inmobiliaria. Y las actualizaciones se producen a intervalos diferentes debido a las arduas conversiones. El seguimiento de los datos en múltiples sistemas no sólo es caro, sino que causa problemas con el flujo de trabajo, la coherencia de los datos y la visibilidad. Procesos ineficaces. Los procesos manuales e ineficaces te quitan tiempo para centrarte en actividades de mayor valor. Tal vez un responsable de seguridad tenga que volver a la oficina, localizar el formulario adecuado, rellenarlo y devolverlo cada vez que se produce un incidente. Cada paso del proceso representa una oportunidad para que la información se retrase, y para que se olviden u omitan accidentalmente detalles críticos. Para cuando ese formulario llega por fin a quienes pueden instituir medidas correctoras, su eficacia para mitigar futuros incidentes o reducir el impacto de las reclamaciones puede haber disminuido mucho. Partes interesadas. Las prioridades contrapuestas, los objetivos opuestos y las actitudes contradictorias pueden ser especialmente difíciles de gestionar. Tu prioridad como gestor de riesgos puede ser, por ejemplo, recopilar datos completos de todos los vehículos de la flota para una renovación. El gestor de la flota, sin embargo, puede estar ocupado haciendo malabarismos con los programas de mantenimiento. Tendrás que esperar a que ese gestor tenga tiempo de atender tu solicitud. Ambos hacéis vuestro trabajo, pero vuestras prioridades inmediatas no coinciden. Añade cada parte interesada adicional a la ecuación y el impacto de la fricción aumentará exponencialmente. Un retraso en el cobro de valores, por ejemplo, es relativamente fácil de tratar en un ecosistema de riesgo sencillo que incluya una empresa con una única ubicación, un corredor y un transportista.

Pero si ese retraso se produce en un ecosistema más complejo, el impacto se propagará a través del trabajo realizado por todas las partes interesadas y el efecto acumulativo sobre los costes financieros, operativos y estratégicos será sustancial. La fricción de datos resultante causada por tecnologías dispares, procesos ineficaces y partes interesadas inhibe la productividad, aumenta los costes y hace que cada decisión sea más arriesgada porque no tienes la visibilidad que necesitas. Para saber cómo puedes minimizar la fricción de datos, estate atento a la próxima entrada del blog de esta serie.