Los gestores de riesgos saben que la ERM es importante, pero a menudo queda relegada a un segundo plano porque, bueno, no es exactamente fácil cuantificar el impacto potencial de intangibles como fenómenos meteorológicos, ciberataques o un golpe a tu reputación. Sin embargo, se trata de amenazas reales con costes reales que hay que reconocer. Y la tecnología de gestión integrada de riesgos puede ayudar. He aquí cómo:
Identifica tus riesgos y el impacto potencial. Una forma en que la ERM difiere de la gestión de riesgos tradicional es que analiza los riesgos colectivamente, no sólo individualmente. La tecnología de riesgos puede extraer información de riesgos de toda la organización en una fuente cohesiva que te da una visión clara de todos los riesgos, cómo se relacionan entre sí y el impacto acumulativo en la organización.
Ayuda a visualizar tu panorama de riesgos. La tecnología adecuada puede convertir datos de riesgo increíblemente complejos en sofisticados gráficos comprensibles y, por tanto, procesables.
Aprovecha bien tu tiempo. La tecnología recopila, consolida y formatea automáticamente los datos, para que puedas dedicar tu tiempo a acciones estratégicas que aumenten el valor de la organización.
Simplifica el cumplimiento. Con la tecnología, todo lo que necesitas para cumplir los requisitos estatales y federales, en constante cambio, está en un solo lugar, listo para usar, lo que ayuda a proteger los resultados de la empresa, y su reputación.
Prioriza los riesgos. La tecnología ayuda a prever la probabilidad de impacto y las ramificaciones probables para que puedas centrarte en las que más importan.
Se adapta a las condiciones cambiantes. La tecnología adecuada puede recalcular continuamente el impacto potencial de diversos sucesos y amenazas.
Ayuda a tomar mejores decisiones. La tecnología te proporciona información completa, precisa y actualizada al minuto para que puedas aprovechar las oportunidades al alza y minimizar los costes a la baja. También facilita elevar los datos de forma rápida y sucinta a la alta dirección para la acción ejecutiva.
Crea una cultura del riesgo. Con la tecnología de riesgos adecuada, las personas de todos los niveles y funciones pueden acceder a la misma información para colaborar fácilmente y trabajar juntas hacia los mismos objetivos. Si quieres implantar un programa de ERM, necesitas la potencia de la actual tecnología integrada de gestión de riesgos. Así de sencillo.